Análisis Assetto Corsa

Con varias franquicias de éxito detrás, 505 Games ha preparado el salto a consolas de su gran estandarte en el mundo de la simulación automovilística. Rocket League, Payday 2 o el más reciente ABZÛ son algunas de las credenciales con las que confiamos plenamente en la compañía italiana. Como no podía ser de otra manera, esta vez los encargados de llevar a cabo este proyecto ha sido la empresa de simulación deportiva, también italiana, Kunos Simulazioni.

Creada en 2005, Kunos Simulazioni ha proporcionado tradicionalmente software de simulación a la escudería Ferrari y para sus pilotos, por lo que en el sentido de trasladar la sensación de conducción, la elección no podría haber sido más acertada. Tras casi dos años después de su salida original en PC y varios retrasos después de su anuncio para consolas, esta versión llega más tarde de lo esperado para que toda la comunidad pudiese disfrutarlo. Assetto Corsa ha llegado a las consolas de sobremesa y nosotros hemos podido probarlo. Agarraros al volante, porque vienen curvas…

 

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Pongamos las cartas sobre la mesa: PS4 y con mando. Una vez dicho esto, vayamos por partes. El apartado gráfico es totalmente excelente, en lo que a modelados y texturas del propio coche se refiere, sin embargo no he podido evitar fijarme en el resto de apartados que conforman el ambiente de circuito. El “atrezzo”, ya sea las gradas, público u operarios del circuito, están muy poco trabajados. Desde personas que podemos atravesar hasta público sacado de hace dos generaciones. Comprendo que en este caso no se busca mucho más allá de la estricta simulación pero esos detalles hacen que los circuitos carezcan de un poco de vida.

El mando. No puedo negar que me encarceléis por no tener un volante para la ocasión, teniendo en cuenta además que Kunos Simulazioni recomienda y permite hasta 41 volantes compatibles con el juego, ya que han puesto mucho empeño en que el “force feedback” sea especialmente notable a la hora de conducir. A pesar de todo, hacerse con el control a través de un mando resulta bastante complicado y hay que realizar varias sesiones largas para pillarle el “truco”.

 

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El diseño de los menús no me ha sorprendido mucho, resultando bastante genéricos y poco trabajados.  Sin embargo, son sencillos de seguir y no presentan ninguna complicación a la hora de escoger el modo que deseemos. Tenemos diversas opciones a escoger entre las que encontramos Práctica, Carrera Rápida, carreras Online contra otros usuarios y un modo que va a hacer las delicias de todos aquellos aficionados a los derrapes: Drift. Este tipo de conducción tiene un apartado y un circuito propios en el que poder disfrutar con, por ejemplo, un BMW E30 totalmente preparado para la ocasión. Un gran detalle, sin ninguna duda.

En lo que a número de coches se refiere, nos encontramos con un total de 94 coches. De esta cantidad 9 son descargables, tras previo pago por supuesto. Esto supone una cifra menor a los que presentan sus principales competidores como Forza Motorsport 5, con 200 modelos, o Gran Turismo 6 con unos 1200(la mayoría sin apenas variación). Team Lotus 98T, el Pagani Zonda R, el Ferrari LaFerrari, el Mercedes C9 y el McLaren 650S GT3 son algunos de los imprescindibles que podremos pilotar con total libertad. Aun así, se mantiene por delante de los 65 de Project Cars, lanzado hace poco más de un año. Son 94 coches de las principales y más importantes marcas, aunque podría ser mejorable en este sentido.

Por otra parte, nos encontramos con los circuitos. Hasta de 31 recorridos podemos disfrutar, prácticamente todos ellos cogidos del mundo automovilístico europeo. Muy de agradecer en este apartado la inclusión de versiones históricas de circuitos como Monza durante los años 60. También muy a tener en cuenta, los desarrolladores han ido expresamente hasta todos esos trazados para escanearlos con láser y recrear hasta el último detalle: baches, cambios de rasante, altura de los pianos… Este procedimiento no se suele usar de forma común en casi ningún juego. Silverstone, el propio Monza, Spa-Francorchamps o Nürburgring-Nordschleife son algunos de los que se incluyen, aunque únicamente nos falta un gran clásico como Le Mans. Haber incluido una prueba consistente en las 24 Horas hubiese sido la guinda al pastel.

 

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Uno de los aspectos más a tener en cuenta en este tipo de simuladores es la posibilidad de modificar las características climáticas. En este sentido nos hemos encontrado con una ligera decepción, ya que no se puede cambiar a lluvia ni a noche. Marco Massarutto, responsable de Kunos Simulazioni, ya se había pronunciado al respecto, afirmando que este tipo de modificaciones “una vez que los has probado varias veces, son casi olvidadas, y una porción menor de los jugadores los usan con regularidad”. Una pena esta decisión por parte de la compañía italiana.

Kunos Simulazioni ha hecho un trabajo excelente en muchos aspectos, sobre todo en los más importantes. La recreación de circuitos y coches es una auténtica delicia, donde se nota todo el esfuerzo y cariño que ha imprimido Kunos. Aquel que busque un “puro” simulador, tiene en sus consolas una de las mejores apuestas de todo el mercado. Y precisamente sea ese “purismo” el que pueda rechinarle más otro sector. La ambientación o la presentación en líneas generales podrían haber estado más perfeccionadas o, preferiblemente, se podría haber sido bastante más original. Básicamente, un port a PS4 y Xbox One que respeta al juego original y que nos puede proporcionar horas y horas de placer a los amantes del mundo del motor aunque se resienta en otros aspectos.