Análisis Chase: Cold Case Investigations

La noticia del cierre de Cing en 2010 fue un auténtico jarro de agua fría para los aficionados a las novelas gráficas. Este equipo japonés nos demostró que sus videojuegos Another Code, Hotel Dusk y Last Window podían tener una narrativa a la altura de las mejores novelas, con personajes redondos y multifacéticos y una trama evolutiva, acompañadas de un ambiente noir reforzado por su apartado artístico y sus bandas sonoras. Pero nunca es mal momento para disfrutar de una buena historia, por lo que el director Taisuke Kanasaki y el compositor Satoshi Okubo regresan con su nueva aventura para 3DS: Chase: Cold Case Investigations. Así que abrid vuestro mejor whiskey porque volvemos a investigar.

 

Asesinatos en frío

Las investigaciones policiales llegan a menudo a un punto muerto, y posteriormente son archivados. Nuestros protagonistas, el cínico detective Shounosuke Nanase y su joven ayudante Koto Amekura, forman parte de un destacamento especial en la policía de Tokio encargado de sacar los muertos del armario y aclarar algunos de estos oscuros casos. Se trata ciertamente de una historia policíaca de corte noir, aunque a diferencia de la saga de Kyle Hyde, aquí ejecutamos nuestro trabajo de modo más frío y profesional desde nuestro despacho y nuestro salón de interrogatorios. El caso presentado en esta ocasión es el que rodea las circumstancias de la muerte del sr. Minami, un hombre de 45 años hallado muerto tras la explosión de una bombona de gas en la habitación de suministros de un hospital local; Los detalles son poco claros y no hay que descartar la posibilidad de que hubiera sido asesinado. Aunque por supuesto, no todo es tan sencillo como parece, y sin comerlo ni beberlo nos hallamos ante múltiples sospechosos y varias subtramas. Nada es lo que parece.

Me alegra sobremanera afirmar que Chase mantiene el pedigrí narrativo de las anteriores novelas gráficas del equipo. La química entre personajes principales es genial y todas las conversaciones tienen un ritmo natural que no había visto desde… bueno, desde Hotel Dusk. El detective Nanase no comparte sólo constitución y perilla con nuestro viejo amigo Kyle Hyde, también su actitud. Los personajes, como es típico en este autor, se comportan de manera extraordinariamente natural y humana. La trama, por su parte, mantiene un ritmo adecuado y dosifica sus giros argumentales como debe. Pero toca mencionar duración y precio. Chase es un título digital exclusivo de la eShop de 3DS a un precio de 6 euros. Como tal, su duración es de aproximadamente una hora y media. Si vale la pena pagar el precio de entrada dependerá de cada uno, pero corresponde decir que lo -poco- que hay aquí es muy bueno, y desde luego gustará a los fans de otras obras de Kanasaki.

 

Simplificando lo simple

No voy a mentir: Chase es un juego con un apartado jugable prácticamente nulo. Toda nuestra interacción consiste en pasar entre textos de diálogo, hacer las preguntas correctas en los interrogatorios e investigar un par de fotografías del lugar del crimen. La variedad de puzzles e interacciones que había en Hotel Dusk y Last Window no está aquí. Por supuesto, el presupuesto y la mano de obra disponibles para este título eran irrisorios, con lo cual han habido recortes en la jugabilidad. Más allá de esto, lo poco que se puede jugar está bien tallado, a pesar de que la dificultad de los interrogatorios sea bastante baja. A pesar de ello, la baja interacción contribuye a aportar ritmo a la narrativa, que se distribuye en diversas escenas de pocos minutos, formando una estructura parecida a la de una película -también en duración-. Pero probablemente esto no sea lo único que veamos del detective Nanase: la aventura termina con un cliffhanger importante que abre la puerta a continuaciones, así que Distant Memories es con toda seguridad la primera parte de una historia mayor.

 

Genialidad destilada

Los diseños de los personajes traen viejos recuerdos pero están ahora modelados en 3D. Y hay que decir que, obviando un par de ellas, las animaciones son muy buenas. Contar con ambas pantallas al mismo tiempo para la presentación de las escenas es una novedad bienvenida, mostrando mucho mayor detalle que en las obras de la difunta Cing. Pero el punto más brillante de la presentación es sin duda la banda sonora compuesta por Satoshi Okubo. El jazz en midi ha vuelto, con sus vibráfonos, sus líneas de bajo a contratiempo y sus líneas de piano cortadas. Se reafirma de nuevo el brillante combo que supone la música de Okubo más la narrativa de Kanasaki, dando lugar a una presentación madura y cohesionada. Siempre hay que estar abierto a descubrir nuevos autores y estilos, pero a veces sólo queremos que nos cuente una historia aquél quien sabemos que lo hace bien.

 

Conclusión

Chase: Cold Case Investigations es un aperitivo delicioso para una historia que sabemos no termina aquí. El reencuentro de genios a los que no habíamos visto en años y la promesa de más me mantienen optimista con el futuro de esta IP. Restará ver si el público lo acoge abiertamente o si queda como otro título de culto que gane reputación con el tiempo.