Análisis Beyond Two Souls
Hablar de Beyond Two Souls (prefiero el nombre original que “Dos Almas“) en los videojuegos es hablar de un tema tabú para muchos usuarios. Esto se debe a que la comunidad de jugadores está separándose cada vez más debido a la gran cantidad de géneros y variaciones de los videojuegos que podemos ver hoy en día: aventura gráfica moderna o aventura gráfica click and point, conducción arcade o conducción de simulación, shooter arcade o shooter de simulación: y así podríamos continuar hasta el infinito con la inmensa cantidad de juegos que hay hoy en día, donde además en varias ocasiones divide a la comunidad, muchas veces incluso en juegos del mismo género.
¿Película o videojuego?
Entremos en profundidad. David Cage (creador del juego) tiene muchos detractores debido al enfoque “cinematográfico” que aporta a sus juegos, de ahí que muchos usuarios lo tilden más de película o película interactiva que propiamente un videojuego. Podría abrir aquí un artículo de opinión de lo que para mí convierte a algo en un videojuego, pero lo resumiré diciendo que es un videojuego y añadiendo los dos siguientes párrafos. El artículo para otro día, queridos lectores.
Ya que considero videojuegos títulos como The Walking Dead de Telltale Games, Hear Story, y varias aventuras gráficas donde la interacción es bastante escasa, sería de hipócrita tildar de NO videojuego los títulos de David Cage. He visto videojuegos con menos interacción y libertad donde nadie ha puesto en duda el hecho de ser videojuegos, y menos cuando se trataban de títulos indies que limitaban al jugador simplemente a pulsar un botón, como es el caso de Please, Don’t Touch Anything.
En todo caso algo que podría considerarse película interactiva que incluso pudiendo ser así hay gente que lo considera videojuego es el caso de Dragon’s Lair, título que se jugaba desde hace décadas en las recreativas -y hoy en día en PC y otras plataformas- y aun así es considerado videojuego por muchos. Luego incluso está el otro género de novela interactiva como puede ser el caso de Last Reward: Zero Escape donde 60-70% del juego son conversasiones, sin embargo yo mismo lo considero videojuego. Pero lo dicho, esto daría para un artículo entero reflexionando al respecto, creo que un videojuego puede considerarse simplemente un medio de cualquier tipo de interacción, si no hay interacción, no hay videojuego. Beyond Two Souls tiene interacción, por muy limitada que sea en ocasiones.
Crónicas de dos almas
La historia de Beyond: Two Souls nos sitúa en la piel de Jodie, una joven que tiene a un ente enlazada a ella otorgándole tantos dones como desgracias. Este ser, de nombre Aiden, también será manejado durante el juego en varias ocasiones. La protagonista se verá afectada por un sin fin de desdichas en la cual su billete de ida y vuelta a estas es su propio don.
El transcurso de la trama va variando demasiado ya que se alimenta de flashbacks y otros saltos temporales. Al principio del juego comenzamos con una escena muy avanzada en la trama donde podemos ver a Jodie proclama que en ese momento su vida entera está pasando por delante suya y la tiene desordenada. Desde ese momento deja claro que vamos a ir viviendo recuerdos a recuerdos lo que compone la vida de Jodie: desde su infancia hasta su madurez. Sin embargo, por otro lado disponemos de la posibilidad de disfrutar de toda la historia de manera recta y sin saltos temporales en la versión de Playstation 4, en Playstation 3 es obligatorio jugarlo con los flashbacks y demás.
El hecho de que la historia del juego se ofrezca de manera fragmentada entre recuerdos tiene sus puntos negativos y positivos. Por un lado es bastante agradable ver la variedad de situaciones de una manera que no aburra o abrume por vivir acontecimientos demasiado continuos sin apenas variedad jugable y narrativa. Sin embargo, por otra parte ,además de descolocar un poco en varias situaciones, deja un larguísimo vacío molesto en la trama que solo se va llenando cuando estamos en la recta final. Por si no fuera poco, el juego se hace continuamente auto-spoilers en varias ocasiones gracias a este método de llevarnos por la trama, como por ejemplo vivir una escena límite en el que nuestro personaje puede llegar a quitarse o perder la vida, pero sabremos que no va ha ocurrir eso porque ya hemos vivido un momento posterior de esa escena.
Uno de los mayores defectos de Beyond Two Souls es fallar a la hora de engañar al jugador para hacer ver como que este está en el control pudiendo elegir. El juego tiene una línea a la que no le afecta ninguna elección ni cambio, salvo con el final improvisado donde han podido hacer todas las bifurcaciones que les diera la gana por ser el final. Que el juego no nos de una real elección no es el problema, sino que nos ofrezca la posibilidad de elegir y aún así no afecte en nada siendo al final una historia en la que estamos de espectadores más que como jugadores, lo cual corta bastante la empatía del personaje en muchas situaciones.
A pesar de todo, la trama es entretenida e interesante, siempre que asumas que la historia es de Jodie, no tuya. Al menos en mi caso y de mi pareja completamos el juego en tres sesiones de 2 a 4 horas cada una, lo que a mí me resume a que es un juego disfrutable y que a pesar de que tenga sus fallos pasarás un buen rato con su trama. No se me hizo pesado en ningún momento y estaba siempre con continuas ganas de saber qué sería lo próximo que vería de la vida de Jodie y su acompañante Aiden.
Interacción sin espera
La jugabilidad del juego es muy directa e intuitiva, la mayoría de la jugabilidad se basa en la utilización de los joysticks, uno para movernos y el otro para elegir con qué o cómo interactuar. Los Quick Time Events también hacen uso del joystick de una manera muy curiosa, y es que ahora no te muestran nada en pantalla, sino tan solo una ralentización del tiempo donde debes mover el joystick en la dirección correcta según hacia donde se dirige el cuerpo o movimiento de la protagonista. De todos modos, siguen presente algunos QTE donde sí nos indican qué botón presionar, pero los del joystick suelen abundar mucho más. Por otro lado el juego dispone de un diseño jugable que no penaliza en absoluto al jugador, aunque eso no será ningún problema si caes en la sensación de creer que estás haciendo algo, y eso al fin y al cabo será lo que te permita disfrutarlo sin problema.
La exploración como era de esperar es muy limitada en un juego de este estilo, aunque en ocasiones nos dejan deambular por alguna zona donde disponemos de varias cosas con las que interactuar. De todos modos, la libertad se resume a unos pequeños momentos en unas pequeñas zonas, pero al menos se agradece la posibilidad de que el jugador pueda descubrir ciertas cosas por su propia mano cuando el juego podría ser completamente lineal, aunque bueno, se podría decir que lo es.
He hablado de las zonas de “exploración” que se agradecen, sin embargo en general el juego nos lleva de un lugar a otro de manera muy lineal, y no suele ser problema en la mayoría de los casos, pero otras veces no solo te sientes demasiado guíado, sino incluso forzado a continuar. Aún así, aquí repito lo mismo que con los aspectos de la trama, si estás dispuesto a dejar que te lleve sin más y a disfrutarla no lo pasarás nada mal, en cambio, si te paras demasiado a pensar qué puedes hacer y qué no es posible que en varias ocasiones te moleste.
Pasando el mando
Me gustaría comentar el modo “cooperativo” del juego, ya que me ha parecido algo muy curioso y al mismo tiempo criticable dada la poca satisfacción que me generó este modo supuestamente para dos jugadores.
Al iniciar el juego te da la opción de poder disfrutarlo con compañía, y la verdad es que esta clase de juegos se disfruta mucho junto a alguien, no por lo jugable, sino por el aspecto narrativo que de normal a uno le gusta deleitar en compañía. Ya lo había disfrutado mucho en Heavy Rain con mi pareja al lado mientras lo jugaba, e incluso jugamos a dicho título con el mando de movimiento Move en la mano de uno y el otro con el Navigator en su mano, lo cual era curioso dado que uno hacía las acciones y el otro movía el personaje. Aunque con una jugabilidad “capada” estábamos pasándolo genial los dos en dicho juego sin que ninguno parara de jugar.
Obviamente al ver la posibilidad de jugar dos jugadores en Beyond Two Souls ya sabía que automáticamente sería una experiencia mucho mejor pudiendo controlar cada uno un personaje protagonista. Desgraciadamente no fue así en este aspecto, era un literalmente un “pasa el mando”, lo cual de cooperativo para dos jugadores no tiene nada.
El juego entero se resumía a que uno controlaba a Jodie y otro a Aiden (el ente con poderes) y durante la trama se turnan los personajes para hacer cierta acción, como por ejemplo en muchos casos será necesario usar los poderes de Aiden: manipular o asesinar a persona, interactuar con objetos, entre otras cosas. Lo correcto y adecuado hubiera sido incluir la posibilidad de usar una especie de pantalla partida para que cada jugador jugara, sin embargo te obligan a estar sentado en el baquillo de espectador hasta que te llamen de vuelta para entrar en juego.
Eso obvio que hubiera sido difícil, complicado y algo que corta directamente la experiencia “cinematográfica” y narrable del juego, pero también tiene su nivel de molestia el hacer estar continuamente al jugador como espectador. De todos modos, al menos se agradece la posibilidad de que cada uno pueda usar su mando para jugar, en vez de estar pasándolo, porque esa es la única posibilidad real que ofrece de cooperativo con la experiencia jugable cortada para compartir. Aún así, el apartado de espectador tampoco está tan mal, gracias a la narrativa del juego también se disfruta un poquito al no ser un juego 100% enfocado a la experiencia jugable.
Aspecto de cine
Los gráficos del juego son espectaculares, especialmente para Playstation 3 con su tecnología llevada al límite para soportar un juego de este aspecto. Pero que el primer plano no nos engañe, la consola sufre para soportar este juego, y es que no solo notaremos algunas bajadas en las tasas de imágenes por segundo, sino que incluso en las zonas más abiertas podremos ver como el juego evita cargar metros más allá o incluo con el enfoque de lo que nos deja ver la cámara y lo que no.
Con Aiden tenemos un control mucho más libre, y en más de una ocasión nos daremos cuenta no solo de que estamos “atados” a Jodie, lo cual tiene mucho sentido con la trama, pero también veremos como esto se debe a que el juego no quiere tener que cargar texturas y otras zonas algo lejanas de Jodie, incluso zonas perfectamente accesibles para esta pero que al estar lejos no se cargan al usar a Aiden.
El control de la cámara también es algo bastante irregular, de hecho es en algunos casos muy molesto. Lo mismo se puede decir del control del personaje, en el que podemos notar un movimiento muy realista sacrificando el control del jugador, como que por ejemplo se gire lento con un movimiento mucho más real de lo que solemos ver.
Si volvemos al plano principal, se ve un juego impecable con una excelente inmersión y que como bien ya dije, un bonito aspecto “cinematográfico” con varias escenas muy interesantes y bien logradas, al igual que el cabado de sus personajes.
Conclusión
Beyond Two Souls es definitivamente uno de esos juegos con muchos defectos pero que se disfrutan perfectamente si uno se deja llevar por la corriente del juego y los ignora, tanto que podrás acabar el juego de una manera muy seguida por su variada trama que está continuamente aportando cosas nuevas. No está obviamente al nivel de lo que ya fue Heavy Rain, pero sigue siendo una experiencia entretenida con un enfoque sobrenatural interesante que desglosa la vida entera de su protagonista donde padece de un don: una segunda alma.