Análisis de Shadow Tactics: Blades Of The Shogun

Aquí llega el análisis de Shadow Tactics: Blades Of The Shogun, título de sigilo táctico de Mimimi Productions que debutó en PC, Mac y Linux en diciembre de 2016 y que acaba de llegar a las consolas PS4 y Xbox One el 28 de julio de 2017. El título ambientado en el Japón feudal de 1615 nos presenta un grupo de 5 especialistas deberán encontrar a un insurrecto que busca acabar con la vida del Shogun, para ello cuentan cada uno con sus únicas habilidades que permiten superar todas las misiones con tu propio estilo y que da paso a un juego con muchas posibilidades y mucha rejugabilidad.

Como si del clásico Commandos se tratase, en Shadow Tactics: Blades of the Shogun encarnaremos a un grupo de especialistas letales que deben abrirse paso a través de las 13 misiones que dispone el juego con sigilo y audacia.Contamos con cinco personajes bien diferenciados, Hayato es un shinobi mercenario muy ágil capaz de usar un gancho para subir a los tejados y lanzar shurikens de forma letal, Yuki es una ladrona dotada de trampas mortales y un silbato que hace atraer a los enemigos, Mugen es el más enfocado a la fuerza bruta pudiendo acabar rápidamente con todos los enemigos que se encuentren su radio de alcance, Takuma es un anciano capaz de usar un rifle de larga distancia y por último tenemos a Aiko, una kunoichi que usa polvos para reducir el campo de visión de los enemigos y que tiene la capacidad de disfrazarse para poder pasar desapercibida y distraer a los guardias dándole al resto del equipo la oportunidad de pasar.

El juego nos ofrece 13 niveles muy bien elaborados y que sobre todo disponen de mucha rejugabilidad ya que al finalizarlo por primera vez se nos revelarán las insignias que podemos conseguir para completar el título al 100%. Estas insignias van desde los clásicos “pasar inadvertidos durante todo el nivel” o “no mates a nadie”, hasta algunas específicas que realizaremos gracias a los eventos especiales que poseen cada pantalla, estos eventos especiales hacen que queramos descubrir nuevas formas de llegar al objetivo, que experimentemos diferentes caminos y que usemos distintos personajes para realizar las acciones que nos proponen.

Gracias a las singulares habilidades del grupo, se nos abren muchas vías de exploración a lo largo del mapa “¿debería subirme a ese tejado y usar las cuerdas que conectan los edificios o vendría mejor usar el carromato que me deja más cerca del objetivo?”. En algunas ocasiones, el propio juego nos brindará nuevas opciones como colarnos en un carromato que nos deja más cerca de nuestro destino o un disfraz de sirvienta en una cesta para no tener que matar a nadie y quitárselo por la fuerza. Todas estas posibilidades hacen que cada vez que juegues, sea una partida diferente que te anima a perfeccionar tus jugadas e intentes nuevas estrategias para conseguir las insignias.

El juego cuenta con la total compatibilidad de jugar con mando, en mi caso lo he probado el de Xbox 360 y lo porteaba perfectamente, además se mostrará la misma interfaz que el título dispone en consolas, todo un acierto para los defensores de los mandos. El título tiene una adaptación perfecta a los sticks y mediante combinaciones de botones tenemos todo lo que el teclado nos puede ofrecer de una manera sencilla y cómoda.

La IA dispone del clásico cono de visión (que podremos ver) para saber si puede detectarnos, pero además reacciona de forma muy natural al sonido (habrá habilidades para atraer enemigos o incluso si andas por el agua y hay un enemigo cerca te escuchará) y tendrá comportamientos que me han resultado muy acertados, por ejemplo si matamos a un enemigo y lo escondemos, sus compañeros se extrañarán al no verle e iniciarán temporalmente su búsqueda, además de que en algunas misiones, nuestros personajes dejarán sus huellas por el suelo y los enemigos se percatarán de ellas y las seguirán.

Pero aunque la IA reaccione muy bien en casi todo el tiempo si que es verdad que a veces se nota que está anclada al pasado en algunos aspectos, los enemigos reaccionan tan bien porque son acciones predefinidas, sabemos el comportamiento que tendrán tras una acción y la poca variedad de estos hace que prácticamente hayamos visto todo lo que nos ofrecen tras las 2 o 3 primeras misiones.

He de mencionar que Shadow Tactics: Blades Of The Shogun es un juego difícil ya no solo si quieres completar todas las insignias, si no durante la partida ya que el mínimo error hará que salten las alarmas y nuestros personajes no son muy dados al combate abierto. Por ello el juego nos recuerda cuando hicimos el último guardado, cuando pasa un minuto aparece un mensaje que nos avisará y saldrá un cronómetro en verde que cuando alcance los dos minutos se pondrá en amarillo, todo ello recomendándonos que guardemos nuestro progreso.

Una opción que si me ha gustado mucho ha sido el “Modo Sombra”, consiste en darle a varios personajes una orden que ejecutaran simultáneamente cuando tú lo decidas, esto es muy útil para derribar dos enemigos que podrían detectarnos si los eliminamos individualmente o para distraer a un enemigo haciendo que un personaje lo distraiga mientras que con el otro haces que se cuele por donde antes estaba su puesto.

-Gráficos, el perfecto ejemplo de que una buena dirección artística es clave-

Cómo podéis ver en las capturas, Shadow Tactics: Blades Of The Shogun no es un título puntero en los gráficos pero la verdad es que cuando lo juegas ni te das cuenta, ni te importa. Cada escenario está tratado y compuesto con mucho mimo y sobre todo, con buen gusto. Desde la paleta de colores hasta la decisión de incluir bordes gordos a cada textura que al menos a mí me recuerda a trazados de tinta china, son todo un acierto que dota al título de una composición visual muy buena.

Aún así, que no sea puntero no significa que sea malo, nos encontramos ante un juego con una calidad gráfica más que correcta, no veréis nada que os desagrade gráficamente, todas las texturas presentan un buen acabado y ninguna zona del escenario se siente vacía. Además, el juego tiene una interfaz preciosa, con unos retratos de personaje de gran calidad que hace que sea todo un gustazo jugarlo.

Los personajes muestran un acabado decente, no tienen un diseño muy espectacular o memorable pero no importa demasiado al verlos la mayor parte del tiempo con un zoom bastante alejado para poder ver mejor el escenario.

 

-Melodías del lejano oriente-

En cuanto a la banda sonora no hay nada relevante que recalcar, cumple con su cometido pero no hay ninguna pieza que destaque especialmente, tampoco hay que tomarse esto como un punto muy negativo debido a que agradeceremos el silencio durante la partida debido a que estaremos concentrados en hacer todo sigilosamente y estaréis escuchando el ambiente más que la banda sonora. Por lo general y debido a lo que he mencionado de la necesidad de estar concentrado, casi todas las piezas suelen ser tranquilas y no hacer mucho ruido, suelen ser sobre todo relajantes.

El título cuenta con voces dobladas con gran calidad al japonés y al inglés, desgraciadamente no tiene doblaje español pero se siente más inmersivo si disfrutáis de las voces japonesas mientras tenéis subtítulos en español, además molesta muy poco al no haber muchos diálogos durante las misiones, y cuando lo haya basta con que estéis ocultos para leerlos.

 

En este breve Gameplay ofrecido por la propia Mimimi Prodcutions, podréis observar el gran detalle artístico que posee el título, su relajada pieza musical mientras juegas la misión y algunas mecánicas que nos ofrecen los personajes.

 

-Batallas de poder, la historia-

La trama del juego se centra en un Shogun que consigue el puesto en la primera misión del título y como intentan acabar con su mandato a través de una conspiración orquestada por Kage-sama. No es ninguna revolución pero se sigue con bastante interés hasta el final y gracias a ella también cogeremos cariño a los personajes, que tienen una evolución durante la campaña.

Como ya he mencionado no es nada especial, pero es lo suficientemente buena como para acordarnos de ella pero al fin de al cabo este juego se basa en completar las misiones de forma perfeccionista. La historia nos servirá durante la primera vuelta para tener un hilo narrativo que conecte las misiones pero lo verdaderamente satisfactorio del título es conseguir los desafíos que nos propone cada misión.

 

-El Veredicto-

Sin duda alguna estamos ante un juego notable que encantará a todos los amantes de la infiltración. Basándose en las mecánicas originadas por Pyro Studios en el mítico Commandos, Mimimi Productions a conseguido crear una obra gracias a la cuál podemos hacernos una idea de lo que hubiese pasado si el estudio español hubiese seguido con su saga de sigilo, sin embargo, gracias a su ambientación y a los personajes que utilizaremos, Shadow Tactics: Blades Of The Shogun consigue ser lo suficientemente distinto del ya mencionado Commandos como para ser tratado como un juego digno del género y que no trata de copiar, si no heredar un legado olvidado y actualizarlo de una forma más que respetable.

 

Lo mejor

• Misiones muy rejugables
• Dirección artística impecable
• Un sistema de mecánicas que funciona perfecto
• Doblajes de alta calidad
• Perfecto control tanto con teclado como con mando

Lo peor

• Falta de variedad de enemigos
• IA a veces predecible y anticuada