El postureo en los videojuegos

El postureo es algo tan común de ver día a día que es difícil de predecir cuándo lo vemos, cual mentiras que genera nuestro cerebro a diario para gesticular con la lengua y boca llegando a una pronunciación de algo que carece de veracidad. Sin embargo, cuando decimos alguna mentira sabes que eso es mentira, mientras que por el lado del postureo, no sabemos cuán cierto es lo que predicamos.

Al fin y al cabo, ¿qué es el postureo? En inglés la palabra que define esto es poser, algo que en parte hemos llegado a usar varias veces en nuestra lengua. Si buscamos postureo podemos acabar dando con esta definición, ya que es algo que no podemos encontrar en la RAE o diccionarios por ser un término que se ha empezado a usar recientemente en internet.

“El término postureo es un neologismo acuñado recientemente y usado especialmente en el contexto de la redes sociales y las nuevas tecnologías, para expresar formas de comportamiento y de pose, más por imagen o por las apariencias que por una verdadera motivación. No tiene todavía registro en los diccionarios.“

Una vez comprendida de qué va la película me gustaría explicar el por qué abarco este tema en los videojuegos. Esto se debe a dos importantes factores, la comunidad gamer es algo que ha crecido potencialmente durante la última década trayendo a nuevos seguidores, a veces gente que no tiene mucha idea de qué va el tema u otros que no tienen la experiencia necesaria para comprender y valorar. Aunque es algo obvio que día a día podemos ver casos de postureo o posers en masa, lo que me motivó a escribir esto es que todos acabamos sufriendo de postureo en algún momento. Al fin y al cabo cuando nos tocar hablar de cosas de las que no tenemos información de primera mano o una idea preconcebida por otro pero que nosotros no podemos confirmarla sucumbimos a ello. Esto es algo de lo que me percaté recientemente durante la elección de los mejores juegos de 2015, donde la manera de dar los premios nos forzaba a cada uno de los redactores sucumbir al postureo en un punto u otro. El año que viene lo haremos de otra manera más razonada y subjetiva.

El postureo es algo que está más presente en el medio de los videojuegos que en otros, y esto se debe principalmente por dos factores: dinero y tiempo. Los videojuegos son caros en comparación con simplemente ver una película o escuchar una música, tanto que hay muchas maneras de acceder gratuitamente a estos dos últimos medios sin recurrir a la piratería, o incluso podemos pagar precios ridículos de alquileres y servicios de suscripción que nos ofrecen MUCHO contenido. A pesar de que podemos acceder a muchos juegos que poco a poco van siendo más baratos, lo cierto es que en general, especialmente títulos Triples-A, son caros. La gente no se gasta de 15 hasta 60 euros para probar un juego, sino para directamente disfrutarlo. Los videojuegos también requieren mucho más tiempo de consumisión que los demás medios, si bien los juegos más cortos duran entre 3 y 5 horas por lo general suelen durar de 10 a 20 horas, y ya ni hablemos de títulos nos mantienen hasta la friolera cantidad de 100 horas de juego o más. Esto es impensable en medios como el cine o la música donde con una tarde puedes consumir varias obras de estos medios, mientras que con un juego tan solo acabas de empezar el primer día de consumo de varios que te faltan para finalizarlo.

Es obvio que todo esto sumándole la saturación de títulos en el mercado que tenemos hoy en día muchos no tenemos tiempo para disfrutar ni de una pequeña parte del catálogo, ni tan siquiera restringiendo nuestro tiempo a títulos triples-A y/o juegos importantes o destacables. Hay demasiados. Con todo esto llegamos a la conclusión de que no podemos opinar a ciencia cierta sobre algo que no hemos probado, así que tan solo nos queda sumarnos a esa opinión general que se tiene del juego, sucumbir al posturismo.

Yo intento evitar el postureo de la mejor manera posible, intentando evitar hablar de esos títulos que no he tenido la ocasión de probar, y menos todavía discutir o debatir con alguien que sí los ha jugado, será obvio que mi opinión palidecerá como un girasol de noche frente a la suya. Por si alguna razón tengo que hablar de ellos explico tan solo impresiones mías al haber visto gameplays, y por si alguna razón pienso en opinión de gente que ha tenido la ocasión de jugarlos, y aparentan declaraciones acertadas, intento transmitir esa misma opinión pero dejando claro que no sale de mi boca añadiendo un “dicen…”.

Es obvio que nunca vamos a poder hablar a ciencia cierta y de primera mano de todos los videojuegos que hayan en el mercado, ni si quiera dedicando 12 horas diarias a jugar todo lo que podamos -ojalá pudiera hacer eso todos los días-. Las opiniones, los análisis, los gameplays, impresiones y demás información subjetiva sobre un juego nos pueden servir como referencia para ayudar a ondear cómo de bien puede estar cierto juego para nosotros. Aún así, nunca vas a poder estar 100% seguro de que todo lo que veas vaya a ser idéntico a como te lo muestran, puesto que no todos tenemos los mismos gustos en todas las variantes de juegos y cada uno de sus apartados, tanto que un juego para una persona puede transmitir mucho, incluso la mejor experiencia de su vida, mientras que para otro puede haber sido una completa pérdida de tiempo.

Con todo esto nos queda tan solo saber que no podemos usar la opinión de otros como nuestra, y menos todavía ir predicando sus palabras como el estandarte de tu mentalidad. Tampoco quiero decir que rechaces toda opinión, pero que sí vayas contrastando con la tuya todo lo que escuches, así podrás formar un opinión propia más acertada en cuanto a lo que realmente te gusta sobre el juego del momento y si de verdad te conviene comprarlo. Tu opinión tan solo será solamente tuya y 100% verídica cuando tú mismo pruebes el juego.

¿Pero el postureo es malo al fin y al cabo? Amigo, claro que sí. El postureo es negativo para la industria porque este acaba por transformar la opinión de unos pocos en la de muchos. Por suerte, a veces también ocurre de manera “positiva” haciendo llegar a más gente una opinión que ayuda a la industria a pesar de que muchos las prediquen sin convicción propia, pero que esto no te alegre, porque el postureo es casi siempre algo negativo. Miremos el caso de Undertale, juego independiente que ha dado un vuelco brutal en los usuarios hace escasos meses, hoy muchos lo tienen ya en un altar, y entre ellos gente que ni tan si quiera lo han jugado e incluso otros que no pueden jugarlo por no disponer todavía de una traducción a nuestra lengua. Yo no he jugado a Undertale, tan solo he probado su demo durante 20 escasos minutos, desconozco completamente si es un mal o buen juego puesto que mi tiempo jugado no me trajo ni una sensación ni la otra, tan solo mostrarme espectante. De todos modos, aún siendo una obra maestra como muchos predican, ¿qué puede impedir que a mí al final no me guste en caso de parecerme un juego aburrido? Tan solo el postureo.